Los abogados de las partes mientras aguardan por la lectura del fallo.
Los problemas primero hay que resolverlos en casa y solo después puede intervenir la Justicia. Ese fue el concepto general que llevó a la jueza civil Cecilia Schroeder a "no hacer lugar" al reclamo de los futbolistas, nucleados en el colectivo "Más Unidos que Nunca", que buscaban la remoción de la directiva de la Mutual de jugadores y la intervención de la gremial.
La Mutual, como toda asociación civil, es "como una sociedad en miniatura", dijo la magistrada y, por tanto, hay que "agotar todos los mecanismos internos" previstos en el estatuto, antes de que sea la Justicia ordinaria la que tome cartas en el asunto.
Cuando Schroeder llegó a ese punto, en una audiencia que demoró la mitad de un tiempo en el fútbol (solo 23 minutos), la cancha empezó a embarrarse. Los abogados de los futbolistas demandantes, que habían llegado con la confianza de que este era un partido fácil, comenzaron a entrar en calor. "Se nos está pidiendo que le digamos a la comisión directiva que convoque a una asamblea, cuando justamente reclamamos que esta comisión no está constituida válidamente".
Los demandantes dicen que hay dos integrantes de la directiva que no cumplen con "los requisitos mínimos para ocupar el lugar que ocupan" y que se está ante "un círculo vicioso" en el que debe resolver el que está siendo demandado.
Los más de 700 futbolistas en actividad que representa el colectivo Más Unidos que Nunca, comenzaron a autoconvocarse hace cuestión de un año con la idea de "cambiar el sistema perverso" del fútbol uruguayo y reclamar así por sus derechos. Dicen que la directiva de la Mutual no los representa y que han cometido "abusos de poder", incluso demandando a cinco deportistas.
La jueza Schroeder enfatizó que la comisión directiva de una institución no son los hombres que circunstancialmente ocupan el cargo, sino que es un órgano en sí. Cuando los integrantes están señalados por sus socios, otros deben tomar momentáneamente su lugar para llamar a una asamblea.
"Se ha recurrido a la directiva reclamando diferentes cosas, no sólo a la convocatoria de la asamblea", dijo en la audiencia Mónica Ivaldi, la asesora legal de los futbolistas unidos. "Se les ha pedido información por préstamos que han entregado a organizaciones deportivas y otras informaciones que también se han negado a dar".
—No he visto ninguna denuncia concreta contra la comisión directiva y no se puso en marcha el procedimiento disciplinario, remarcó Schroeder.
—¿Qué garantías hay de que se dé ese corte?, preguntó la abogada Ivaldi.
—La última garantía es la Justicia, pero primero tienen que agotar la vía interna, contestó la jueza.
La Justicia no sólo no intervendrá, sino que tampoco dijo que sea posible "la remoción provisional" de la directiva de la Mutual. En todo caso se podría solicitar el "desplazamiento" de las autoridades, pero que este no es el caso.
"¿Qué es lo que —a juicio del actor demandante— debería hacer el interventor una vez puesto en su cargo? Nada pide y la sede nada vislumbra que provisionalmente pueda facultar al interventor para que haga a fin de evitar futuros perjuicios al socio y/o a la institución", reza el fallo. "Tampoco puede dejarse a la Asociación acéfala de un órgano de gobierno que cumpla las tareas inherentes a su competencia y finalidad de la institución, según sus estatutos", agrega.
No satisfechos con el fallo, los futbolistas unidos ya anunciaron que apelarán. Son seis días para que se hagan las notificaciones correspondientes y comience a correr el plazo de ese recurso.
"Esto nos cayó como un baldazo de agua fría", reconoció Matías Pérez, uno de los líderes de Más Unidos que Nunca. "Ahora analizaremos lo que dicen los abogados y no se descarta la medida de paro".
En paralelo, el Ministerio de Educación y Cultura, que es el que hace de "policía administrativa de las asociaciones civiles", está a la espera de que la Suprema Corte de Justicia le envíe algunos expedientes de Crimen Organizado que serán incluidos en la causa iniciada en marzo y aún no resuelta.
OTRO DATO
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Según los defensores de la Mutual, el caso nunca debió llegar a la Justicia ordinaria porque es el MEC quien debe resolver si se interviene o no la institución. Pero en su fallo, la jueza Schroeder "discrepa radicalmente" con el criterio de la gremial. La magistrada entiende que se trata de una ley de la dictadura (está vigente, pero es de 1980 y aprobada con cierta intención) y que, en todo caso, fue hecha para que el MEC sea la "policía administrativa" de las asociaciones civiles. En pocas palabras: las cosas hay que resolverlas puertas adentro y, de agotarse las vías, es la Justicia la que tiene la potestad de interponerse.
Agotadas las vías legales, el paso que sigue para los futbolistas demandantes es apostar a la asamblea general que la Mutual tiene que llamar, sí o sí, en diciembre. En esa oportunidad se rendirán cuentas, se darán los balances y, como sucede en todo órgano superior, pueden entrar en juego otras consideraciones. Si aún así no se resuelve el caso, las elecciones están previstas para 2019.
Al mismo tiempo, los futbolistas locales y de la selección uruguaya continuarán sin conceder entrevistas exclusivas a la empresa Tenfield, como tampoco aceptarán ser entrevistados dentro del campo de juego. Es que la compañía que goza de los derechos de televisación había censurado los reclamos de los deportistas cuando ingresaban a la cancha con alguna pancarta, por ejemplo.
Además, se ha acusado a parte de la directiva de la Mutual de no haber repartido entre los futbolistas los derechos de imagen legítimamente generado por los deportistas y pagos por Tenfield.
En las próximas horas puede que surjan nuevas medidas.
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