La vida de Lucas Torreira cambió rotundamente en los siete meses que van del 2018. Llegó el ansiado llamado a la selección uruguaya, jugó su primera Copa del Mundo y pasó al Arsenal de Inglaterra. Así, se transformó en el primer futbolista uruguayo en defender los colores de los Gunners.
“Me genera un orgullo tremendo. Cuando estábamos firmando hablamos de eso. Es algo magnifico para mí, y que disfruto mucho porque sé lo que me ha costado llegar acá. Por eso hoy la vida me paga con este premio” señala el fraybentino a Ovación mientras termina de armar su bolso para emprender otro viaje: el de Inglaterra a Italia, donde aprovechará para despedirse de sus viejos compañeros de la Sampdoria y ultimar los detalles de su vivienda.
Si bien faltaba la firma y algunos detalles, Torreira se fue a jugar el Mundial sabiendo que a la vuelta lo esperaba su nuevo club. Estaba todo acordado e incluso lo llamó el técnico español Unai Emery. “Cuando me llamó no lo podía creer; yo estaba en un hotel con un amigo, y me puse nervioso. Me costaba hablar porque recibir el llamado de un entrenador de un equipo tan importante te genera muchas cosas. Hablamos de varias cosas. Él tampoco me quería llenar la cabeza de muchas cosas porque sabía que se venía el Mundial y que yo estaba concentrado en eso”, afirma el jugador de 22 años, que surgió del 18 de Julio de su ciudad natal antes de llegar a las formativas del Montevideo Wanderers.
A lo largo de la charla reiteradamente habla de lo importante que era para él jugar el Mundial y de que no quería que nada ni nadie lo sacara de foco. Por ello fue que también quería jugar la Copa del Mundo con todo ya encaminado, para no tener que estar pensando en otras cosas. La jugada le salió a la perfección, porque fue uno de los mejores exponentes de la Celeste en la Copa del Mundo. “Sabía de la importancia de un Mundial, quería tener distancia y estar al margen del tema. En muchos lugares de noticias ya había salido, y ya todos más o menos lo sabían. La prioridad era la selección y quería estar muy concentrado”, indica.
El lunes, cuando estuvo todo el día en las instalaciones de Arsenal realizando los estudios médicos, arribó antes que los jugadores del plantel. “Llegué muy temprano al club, mis nuevos compañeros estaban llegando porque entrenaban a las 10, y yo muy tímido los fui saludando aunque no entiendo el inglés, es algo que voy a tener que aprender. Se me acercó el español Bellerín, el arquero argentino Emiliano Martínez y Ramsey. Todos me felicitaban por el papel de Uruguay. Están muy sorprendidos con Uruguay, porque para ellos es increíble cómo siendo un país tan chico podemos sacar tantos jugadores de nivel”, señala a la vez que le pide un minuto al periodista para terminar de cerrar el bolso ya que se tenía que ir al aeropuerto.
Lucas Torreira con el cuadro de Alcides Ghiggia.
Hace días que los hinchas Gunners aclamaban al uruguayo en las redes sociales. En tanto, el club oficializó ayer la contratación con un video refiriéndose a la garra charrúa. Lo peculiar a la hora de firmar el contrato por cinco años fue que la principal abogada del club le acercó un cuadro de Alcides Ghiggia, que tenía colgado en su oficina, con la firma del uruguayo más la inscripción “1950”, y una foto de él sentado en el bar “Lo de Porro”, en su mesa de siempre. “Estaba loca de la vida de que un uruguayo jugara en Arsenal. Es fanática de la historia de los mundiales y en particular de la gesta del Maracaná”, cuenta.
“Ojalá que venga a hacer historia al Arsenal. Es una linda oportunidad para mí. El fútbol inglés es muy intenso. Vi a mis compañeros en el complejo y son todos gigantes jugadores -igualmente para ser gigante al lado mío no se precisa mucho, je- . Es un fútbol al que me voy a a tener que adaptar en muchas cosas, pero también tengo una suerte y es que vengo del fútbol italiano, que creo que es la escuela de todos los fútbol en lo táctico”, agrega el fraybentino con sentido del humor.
Tras estar hoy en Italia, mañana viajará a Uruguay, donde descansará hasta el 28 de julio, ya que el 30 se tiene que presentar para empezar los trabajos en Arsenal.
El Mundial no le permitió tener descanso al final de la temporada, pero le hizo cumplir su sueño de vestir la Celeste, esa chance que esperó incluso dejando de lado rumores que lo vinculaban a la selección italiana, cuando deslumbró con sus primeras actuaciones en la Sampdoria.
“Antes de ser citado hablé mucho con Gastón (Ramírez) de la selección. Cuando llegué me di cuenta que todo lo que me dijo era verdad. Es algo increíble convivir con este grupo de personas. Pasamos un Mundial maravilloso. Estar con tu familia, ver a los hijos de los compañeros disfrutar y divertirse, generaba un clima muy lindo. Todo eso después se veía reflejado adentro de la cancha. Ver a cada compañero entregar todo por cada pelota eso es algo tremendo, entonces cuando vos ves ese tipo de cosas sentís una carga de más y una energía muy grande que querés plasmar en la cancha a toda costa”, habla sobre cómo vivió el Mundial de Rusia.
"No hay que reprocharle nada a este grupo".
Lucas Torreira.
Sobre Uruguay en el Mundial 2018.
Por último, se refiere a la sensación que le dejó la actuación de la Celeste y, también, sobre el futuro: “No hay que reprocharle nada a este grupo. Dejamos todo en la cancha. Estoy muy ilusionado con este plantel, con lo que plantea el entrenador. Ojalá que mi camino en la selección sea muy largo”.
Cristiano Ronaldo ya no estaba.
“Hicimos un gran partido en lo colectivo, más allá del rendimiento de uno”, dice Torreira sobre el duelo con Portugal, donde se saca protagonismo. “Después del partido fui a buscar a Cristiano para sacarme una foto con él, pero salí muy tarde y ya no había nadie en el otro vestuario. En la cancha, con la emoción y con la alegría que tenía fui derecho a abrazar a mis compañeros y a los hinchas. Estaba muy cansado y acalambrado”, narra sobre su anhelo no cumplido con el jugador al que lo marcó muy bien.
EL DATO.
Arsenal pagó un precio más alto que la cláusula.
Si bien la cláusula de rescisión de Sampdoria era de 25 millones de euros, Arsenal la elevó y pagó 30 para llevárselo. Borussia Dortmund y Napoli también estuvieron en la puja por el volante.
A Uruguay en pareja.
Hace algunos meses que Lucas está de novio con la modelo italiana Vittoria Repetto. La conoció por las redes sociales y es fanática de Sampdoria. Mañana ella viajará por primera vez a Uruguay.
El apoyo incondicional.
“No ha sido fácil para mí llegar acá. He hecho mucho sacrificio y esto es increíble. Por suerte tengo la familia y los amigos perfectos, que siempre me estuvieron ayudando en los peores momentos”.
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